Quimsa y Flamengo, de visitantes, dieron un paso importante en la BCLA

El primer cuarto del partido fue un preludio de lo que ocurriría durante encuentro: un juego ajustado y físico, en el que San Lorenzo nunca pudo despegarse demasiado de Quimsa. La producción de Marcos Mata, faro ofensivo del local durante todo el parcial (8 de los 25 puntos), fueron respondidos con un formidable juego interno del visitante, amparado en la labor de Brandon Robinson (8) e Ismael Romero (5). Un par de arrebatos aislados de Dar Tucker (5) en ataque no fueron suficiente y los dirigidos por Néstor García culminaron el cuarto por encima (25-21), pero incomodados por el impacto que su rival tuvo en la pintura.

San Lorenzo comenzó el segundo parcial impreciso desde larga distancia y poco tardó Quimsa en aprovecharlo. A cinco minutos del cierre de la primera mitad, los santiagueños empataron el partido (31-31) explotando su dominio en las cercanías del aro. Fue José Vildoza quien, con 5 puntos consecutivos, destrabó el desarrollo del encuentro y forzó el primer tiempo muerto de la noche. A partir de allí, el elenco azulgrana sacó a relucir su férrea defensa y castigó en el otro costado de la cancha, para completar un parcial de 15-2 e irse al descanso con una diferencia holgada (48-35).

El complemento volvió las cosas a como estaban en el principio. El local disminuyó su intensidad en defensa y los actuales punteros de la Liga Nacional empezaron a acercarse a través de su característico poder de fuego. Apareció la mejor versión de Mauro Cosolito, haciéndose cargo de la gestación y anotándose dos triples en la planilla. Romero terminó tres posesiones casi consecutivas con volcadas y, de un momento para el otro, Quimsa se puso por encima en el marcador. Un triple de Nicolás Copello que no pudo ser contestado por Nicolás Aguirre le permitió a la vista entrar al último parcial con un punto de ventaja (65-66).

El cuarto final no le escapó al guión de los tres anteriores. Las ventajas jamás se agrandaron y a cada canasta significativa de un equipo le seguía otra como respuesta inmediata del oponente. Fueron un total de ocho cambios de liderazgo, hasta que un triple de Leonardo Mainoldi a 37 segundos del desenlace selló el destino del juego. Quimsa no falló las dos veces que San Lorenzo lo envió a la línea de libres y así se llevó una victoria por 84-91 del Polideportivo Roberto Pando, vital para sus aspiraciones de campeonato. Este jueves, en Santiago del Estero, se disputará el segundo encuentro de la serie (al mejor de 3) que hasta el momento no ha defraudado.

Leandro Carranza/basquetplus.com

Está aceitado, concentrado, y con un nivel de juego que asombra. Flamengo demostró por qué es el gran candidato a quedarse con el título, venció 63-54 a Instituto como visitante y se acerca a la definición de la Basketball Champions League Americas.

El triunfo de los brasileños fue justo, teniendo en cuenta que el desarrollo lo favoreció de principio a fin. Siempre fue con Olivinha como gran figura, tanto en la pintura como cuando tuvo que ayudar al resto de sus compañeros. El emblema de Flamengo terminó con 20 puntos y 10 rebotes.

Su ladero perfecto fue Marquinhos Sousa, quien hizo 15 tantos y también estuvo fino en la marca, algo fundamental en este Flamengo que defiende y mete miedo a sus rivales.

La otra gran parte del triunfo visitante tuvo que ver con la poca eficacia que mostró Instituto. El equipo de Ginóbili jugó algo nervioso, impreciso y extrañó mucho el aporte de Martín Cuello y Santiago Scala (0-18 de campo entre ambos), algo que habitualmente no pasa. Las dos vías de goleo elegidas por los cordobeses fueron Nicolás Romano y Gastón Whelan, que terminaron con 13 y 18 puntos, respectivamente.

El Mengao fue mucho más, desde la conducción de Balbi y Ramos, hasta el poderío interno de Olivinha, Marquinhos y Eloy Vargas, que aportó lo suyo desde el banco.

Ahora los brasileños tendrán dos posibilidades para llegar a la final de la BCLA, y ante su gente en Río de Janeiro. El jueves será el segundo juego desde las 19.30 y buscarán estar en la definición. Instituto no tiene margen de error y tendrá que ir a buscar una victoria que le permita soñar con un tercer y decisivo encuentro.

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