El maratón de Tokio, el primero de los seis Majors de cada año, se disputará el domingo 1° de marzo solamente con los corredores de elite, ya que sus organizadores decidieron que los participantes aficionados no sean parte, ante el temor de que se propague el coronavirus que azota a China.
“No podemos mantener el evento en la escala que originalmente fijamos y lamentamos informar que el maratón será sólo para fondistas de elite”, indicaron en un comunicado.
La noticia toma vital importancia porque es la prueba de 42,195 kilómetros de la capital japonesa, donde se disputarán los próximos Juegos Olímpicos, aunque ambos maratones serán en Sapporo, para evitar el calor de Tokio.
Casi todos los eventos deportivos en China para los próximos dos meses han sido cancelados, incluyendo el Mundial de atletismo bajo techo y el Gran Premio de la Fórmula 1. Esas suspensiones han tenido un efecto dominó en las competencias clasificatorias para los Juegos Olímpicos y han complicado el panorama para miles de deportistas con aspiraciones olímpicas, familias y sus planes de viaje.
Se calculaba que el maratón de Tokio atraería a 38.000 competidores y ahora con suerte serán poco más de 200, lo que generará imágenes insólitas en la historia. La organización avisó que los aficionados que iban a correr tienen reservado el lugar para la edición de 2021, pero deberán pagar nuevamente su cupo.
En Japón se han identificado al menos 65 personas infectadas por el virus, sin contar los más de 450 pasajeros y miembros de la tripulación de un crucero en cuarentena.
Los organizadores de los Juegos Olímpicos y el COI han señalado que no cancelarán ni pospondrán la cita. “El consejo que hemos recibido de manera externa de parte de la OMS es que no es necesario implementar ningún plan de contingencia ni cancelar los juegos o trasladarlos’’, sostuvo John Coates, quien dirige un equipo de inspección del COI en Tokio.
Clarín/Deportes