MG Radio 24 Villa Pueyrredón
“Hay muchas cosas que se podrán hacer mejor y ni se hacen por todas las internas políticas que le están provocando mucho daño al handball nacional”, afirmó James Parker, unas de las máximas figuras del seleccionado argentino, Los Gladiadores, en los Juegos Olímpicos de París 2024, en una extensa entrevista con Página/12 desde España. Parker, de 31 años -hijo del exNBA James, estadounidense y que jugó en Regatas de San Nicolás- nació en esa ciudad bonaerense, se crió en San Luis; ganó la medalla de oro en los Juegos Odesur 2022 y en los Juegos Panamericanos 2023 con el seleccionado nacional, en el que debutó en 2018 y formó parte de Los Gladiadores desde el 2018 hasta el año pasado. Lateral izquierdo, jugó en los clubes San Luis, Mariano Acosta y Sag Polvorines, de nuestro país; Zamalek, de Egipto, con el que conquistó la Copa de ese país; Al Gharafa, de Qatar, y en los españoles Alarcos, Benidorm y Eón Alicante, de la Liga Ascobal de primera división, donde es uno de los capitanes y se retirará cuando finalice su contrato de tres años que firmó meses atrás.
-¿Está en tus planes retirarte en Argentina?
-No, imposible. Dejo de jugar y me quedo a vivir en Alicante. Soy muy feliz aquí, es un lugar que me fascina.
-Fuiste una de las figuras del seleccionado en los Juegos Olímpicos de París y expresaste “que la realidad los golpeó y que están un escalón por debajo de las potencias mundiales”. ¿Qué le falta a Argentina para alcanzar ese nivel?
-Creo que estamos uno o dos escalones por debajo de los equipos más grandes o consagrados. A la Argentina le faltan años de trabajo y profesionalismo. Es muy complicado que se llegue a ese nivel. Si el deporte no se vuelve profesional, imposible.
-¿Aunque Argentina sea el actual campeón panamericano?
-Incluso siendo campeón panamericano está lejos de Brasil, que hoy es séptimo en el mundo, todavía está un escalón por debajo de esos equipos. Si bien Brasil compite y está en partido, al final se le terminan yendo los encuentros. Y eso que en Brasil el handball es profesional y exportó muchos jugadores. Actualmente, la situación es diferente a la de Argentina.
-Manifestaste: “el handball argentino es un milagro”. Ampliá por favor, ese concepto.
-Con tan pocas fichas de jugadores, que haya sido olímpico cuatro veces consecutivas y esté entre los doce mejores equipos del mundo, y ganándole a Brasil en el último juego panamericano, es un milagro. También por el esfuerzo que hacen los jugadores por estar en la selección.
-Aclará si renunciaste al seleccionado o nunca te convocaron en este nuevo ciclo encabezado por el entrenador Rodolfo Jung.
-Con Jung no hablé ni me convocó, ni nada. En los Juegos Olímpicos 2024 hablé con el cuerpo técnico anterior y le comuniqué que era mi último torneo y que no iba a seguir. Con Jung no hable nada, no sé si él lo sabe o no, pero yo ya cerré mi etapa en la Selección. Estoy en otra etapa, totalmente desvinculado. Espero que le vaya muy bien a la Selección. Lo conozco porque alguna vez jugué al pádel. Sé quién es, pero la verdad es que nunca tuve trato con él.
-Más allá de esto, viste a la nueva Selección. ¿Qué te parece?
-Sí, sí, los veo. Todavía está en formación. Creo que hay varios jugadores que podrían estar, que tienen nivel si se le quiere ganar a Brasil. Los chicos que están dan todo por la selección, pero para mí se nota que el nivel bajó.
-Hablaste del técnico anterior del seleccionado, Guillermo Milano, ¿A tu criterio fue maltratado?
-Sí, totalmente, y con todo el plantel en general. El equipo quedó muy bien con él, espectacular. Es un técnico con el que se puede hablar. Te escucha y tiene en cuenta la opinión de los jugadores. Fue maltratado por la Confederación Argentina. El presidente, Carlos Ferrea, el vicepresidente (ndr: Gustavo Malventano), con las declaraciones que hicieron, las maneras en que lo echaron. La verdad, creo que se hizo mal. Incluso, los jugadores también habíamos hablado un poco y nos mintieron. En la Confederación hay dos posturas o dos bandos que se están peleando por el poder.
-¿Por qué decís que fue maltratado?
-Y, desde adentro, tampoco lo entendemos nosotros. No sé si le caerá mal a alguien de la Confederación o de la Femebal, porque por lo deportivo no puede ser. Supongo que será por algo extradeportivo, porque clasificamos a los Juegos Olímpicos con varios goles de diferencia con Brasil, que es un equipazo. No se entiende.
-¿Cuáles son esos dos bandos?
-El presidente de la Femebal, que a su vez es vicepresidente de la Confederación, y el titular de la Confederación. El handball nacional, la estructura de las selecciones nacionales hoy se ven afectadas por esto y hoy manda la política antes que el tema deportivo.
-¿El handball nacional está cruzado por las internas políticas?
-Creo que sí. Por lo que me cuentan veo que hay muchas cosas que se podrán hacer mejor y ni se hacen por todas las internas políticas.
-¿Cuánto daño le están haciendo al handball argentino estas internas?
-Mucho.
– ¿Cuando terminaron los Juegos Olímpicos, los jugadores le pidieron a Ferrea que el entrenador continuara?
-Es correcto. Tuvimos una reunión en los Juegos Olímpicos. Le planteamos involucrarnos más para tener mejores giras y recursos. Necesitamos que siga Guillermo Milano al mando de la selección. De hecho, Diego lo dijo en una nota con “Handball de primera”. En ese momento se nos dijo que sí a todo y luego fue todo mentira. Nos decepcionó un poco no ser escuchados. Especialmente a jugadores con mucha trayectoria. No escuchar al mejor jugador del handball argentino como es Diego… no sé. Si estuviera en ese lugar, escucharía. Un tipo que está en la esfera más alta y por años del handball mundial creo que algo de idea tiene. Fue una decepción. Después, escuchar las palabras que tuvo hacia nosotros, nuestro juego olímpico, sabiendo que estuvimos dos meses sin ver a nuestras familias y a nuestra gente, descalificó un poco nuestro trabajo. Eso molestó un poco. Yo no tengo relación con él, solo cordial: “hola, qué tal”. No esperaba mucho de él, tampoco.
-¿Cómo es posible que a un jugador de los quilates de Diego Simonet no se le haya prestado atención con los pedidos que hizo?
-Creo que es un tema estrictamente político.
-¿Tenés alguna explicación del porqué tantos jugadores renuncian al seleccionado nacional?
-Lo sé, pero no puedo decir lo que me cuentan mis compañeros.
-¿Qué te generó la decisión de Diego Simonet de decirle adiós al seleccionado?
-Es un poco triste que el mejor salga así. Creo que estaba cansado del destrato para con él, su familia. Creo que fue eso. Él ya venía barajando esa opción. Luego de los Juegos Olímpicos compartíamos habitación él, su hermano, y yo y hablamos de este tema. Le decía: “este es mi último torneo, los quiero mucho. Yo ya me cansé. Tengo una hija y quiero vivir la vida de padre, tener vacaciones. Hice todo lo que pude, disfruté, jugué en la selección, soy más joven que vos, pero yo tengo muy claro esto”. Y Diego respondía: “por qué no un poco más” y al final, se termina retirando antes que yo.
-Es menor que Messi. Podría jugar el próximo mundial de Alemania 2027.
-Sí, podría totalmente. Pero si a Diego se lo escuchara y se lo tratara como a Messi seguramente seguiría.
Marcos González Cezer/Página 12-Deportes
