Vuelve Astérix, vuelve Obélix, vuelve Panorámix y se van de viaje pero nada será igual. Por un lado porque el último de sus creadores originales -Albert Uderzo- murió en marzo pasado, aunque, en realidad, esta será la quinta entrega realizada por JeanYves Ferri y Didier Conrad. Pero sobre todo porque un Astérix de los tiempos que corren no puede ser igual al de sus inicios, en octubre de 1959. Ya se verá por qué.
El guionista Jean-Yves Ferri anunció en una entrevista en el Journal du dimanche que el próximo 21 de octubre aparecerá en Europa un nuevo álbum de Astérix, el número 39. Será el quinto realizado por el dúo, tras la desaparición del tándem GoscinnyUderzo que crearon uno de los personajes más populares del cómic: antes hicieron Astérix y los pictos (2013), El papiro del César (2015), Astérix en Italia (2017) y La hija de Vercingétorix (2019). La editorial Anaya ya anunció que lo traducirá al castellano.
Ferri da apenas detalles del contenido de este nuevo álbum y no ofrece su título, aunque sí adelanta que Astérix, Obélix y Panorámix viajarán a un país, que no indica cuál es. ¿La Atlántida? ¿El Nuevo Mundo?
El guionista dice que será un nuevo destino y que eso no es fácil porque ya han visitado Italia, Grecia, la India y América.
Así que Ferri se limita a decir que este país al cual viajarán los protagonistas “hoy no existe realmente como tal”. Y añade que “este periplo será la ocasión para cambiar ligeramente la narración”. También apunta que Obélix “continua su lenta evolución psicológica”. La poción mágica, mientras tanto, seguirá siendo secreta.
La serie fue creada hace ya más de sesenta años por René Goscinny y Albert Uderzo. Desde entonces se han vendido más de 385 millones de ejemplares en 111 lenguas y dialectos. Con motivo de este anuncio, se ha dado a conocer una página inédita de ese nuevo trabajo en la que puede verse cómo el druida Panorámix urge a sus compañeros para ir a ayudar a un misterioso personaje.
Astérix, Obélix y Panorámix aparecen en una velada tranquila en la aldea gala jugando una partida de ajedrez, cuando el druida se despierta sobresaltado gritando el nombre de un viejo amigo, al que deben ir a rescatar porque se encuentra en peligro. La exclamación del druida aparece tachada con un “confidencial” que se interpreta como un homenaje a otra viñeta de Hergé en Tintín en el Tibet .
Pero, en la entrevista, Ferri dice que cada vez es más complicado burlarse de los clichés de algunos países. Explica que en los años sesenta, Uderzo y Goscinny podían reírse de los extranjeros y caricaturizar a los ingleses con sus grandes dientes o a los griegos con su perfil clásico. “Hoy prácticamente necesitamos un diccionario para saber sobre qué podemos bromear o no”, apunta el guionista.
“Jugar con los clichés era una clave de Astérix”, analiza Ferri. “Pero no me importa correrme un poco de eso. Por suerte mi humor no me lleva a hacer caricaturas muy frontales”. En otra caricatura, contó, se rió del lenguaje adolescente.
Pero evitó (casi) abordar la experiencia que todos tenemos en común en este momento. “Era tentador hablar del coronavirus que afecta a todo el mundo, pero lo dejé de lado. La epidemia es un tema triste, lleno de ansiedad. Es mejor reírse de otra cosa y esperar que finalmente lo hayamos dejado atrás cuando el salga el libro. Aun así, es posible que encuentres una alusión a una poción que parece una vacuna o unos pequeños guiños”.
Ferri precisó, también, que habló de este nuevo episodio con Uderzo. “Le contamos del tema del libro, aprobó la historia, nos dio ánimo. Al contrario de lo que se podría pensar, Albert no pretendía controlarlo todo”.
La noticia del fallecimiento de Uderzo en marzo pasado, a los 92 años, conmovió a todos. Durante mucho tiempo, el dibujante se había opuesto a que se crearan nuevas historias tras la muerte de su colega René Goscinny, en 1977, pero cambió finalmente de parecer. Así, la saga continuó con él mismo en los roles de guionista y dibujante. En 2013 anunció que no podía continuar trabajando y cedió la responsabilidad de hacer Astérix al ilustrador Didier Conrad y al guionista Jean-Yves Ferri.
Clarín/Espectáculos