«Está cerrado en un 93 por ciento», manifestó este jueves Matías Morla, abogado del exN° 10, en una nota con Radio La Red, y agregó: «La idea es que dirija el próximo partido, contra Racing». El presidente Gabriel Pellegrino fue más allá y habló de un «99 por ciento» de posibilidades. Un rato antes el propio Maradona, a través de un video, agigantaba la ilusión de la comisión directiva. «Dicen que no me puedo mover, pero mirá», expresaba Diego mientras comenzaba una lenta caminata. Si bien fue una grabación casera muy corta, tuvo tiempo para estamparle su sello (pasional y polémico): «A toda la gente del Lobo, acá (golpeándose el corazón). Ustedes saben que hay una yunta enfrente que me tiró los huevos para abajo y esa no se la perdono a nadie». ¿Golpe para Juan Sebastián Verón, para Fernando Burlando o para ambos?
La novela Maradona-Gimnasia se vivió minuto a minuto en La Plata. En la calle, en los cafés y en las oficinas prácticamente no se habló de otra cosa. Las radios platenses se tornaron monotemáticas. Los simpatizantes albiazules rebalsaron las redes sociales con publicaciones con imágenes de Diego. Hasta Pedro Troglio, técnico tripero hasta hace unos meses, lo motivó por Twitter para que aceptara el desafío: «Tu energía lo puede todo. No lo dudes» (y acompañó la frase con dos imágenes junto al ex capitán de la selección nacional).
¿Qué le falta a esta historia? Dos pasos: que directivos, Maradona y su entorno ultimen algunos pormenores de logística; y que el entrenador confirme su cuerpo técnico (Gabriel Batitusta agradeció el ofrecimiento, pero tiene programada una operación en un tobillo en Suiza que le impide aceptar).
Habrá que ver cuál es la respuesta final de Diego, quien además aguarda resultados de estudios médicos para saber si se encuentra en óptimas condiciones como para hacerse cargo de un plantel profesional. Hace 40 días le colocaron una prótesis en su rodilla derecha y hoy no sería recomendable que trabajase todos los días con las exigencias de un DT de alta competencia. La CD del club platense cree que una figura de semejante envergadura servirá para paliar dos crisis: la futbolística y la financiera.
Gimnasia decidió ofrecerle el cargo de técnico al personaje más convocante de la historia del fútbol. El Tripero precisa de un inminente cambio de rumbo y con la llegada de Maradona los dirigentes pretenden una significativa inyección anímica. Un gran golpe de efecto. La intención es ocasionar un giro rotundo, que ayude a modificar el presente: está último en la Superliga (un punto sobre 15) y también en los promedios (57 unidades en idéntica cantidad de encuentros). «Lo que puede aportar a nivel motivacional es tremendo», le dijo a la nacion José Luis Staiano, importante dirigente del Lobo. Casi que lo garantizó. Hasta ahora, en su carrera como DT (Deportivo Mandiyú; Racing; seleccionado argentino; Al Wasl y Al Fujairah de Emiratos Árabes; Dorados de Sinaloa), sumó el 57 por ciento de los puntos.
La segunda razón es lo que provocaría en el factor monetario. La dirigencia sostiene que su arribo causará un poderoso y positivo impacto en las arcas. Gimnasia se encuentra concursado y la marca Maradona producirá ingresos que no posee en la actualidad: mayor venta de camisetas, recaudaciones récords en los partidos, publicidades de elite y varios etcéteras.
Incluso, posicionar al club a otra escala por fuera de los límites de su ciudad. Más allá de sortear la crítica situación futbolística, el Lobo debe sanear su economía y el ex Nº10 emerge como una oportunidad histórica. «Significa un foco de atracción por la pasión que genera, pero también por la llegada de empresas concretas. El desafío será cómo hacemos para sincronizar las estructuras que tenemos con un personaje tan grande. Y que esto nos haga crecer», expresó Norberto Gobbi, responsable de marketing tripero. Y el tesorero Gerardo Marzola confirmó: «En lo financiero, sería un cambio sideral».
Puede salir muy bien o muy mal; en esta decisión, parece no haber grises. Lo concreto es que Diego está muy cerca de convertirse en el nuevo entrenador del Lobo. El viernes sería la respuesta final de Maradona a una propuesta tan osada como revolucionaria.
La Nación/Deportes