
Santiago Silva, hoy delantero de Argentinos Juniors, fue suspendido de manera provisoria por doping luego del partido que disputó con la camiseta de Gimnasia y Esgrima La Plata ante Newell’s, el 12 de abril pasado. El futbolista se sometió a un análisis que demostró que presentaba «niveles altos de testosterona».
«Estaba tratando de tener otro hijo y estaba haciendo un tratamiento de fertilidad. Nunca tomé nada para mejorar mi rendimiento deportivo. Lo hice en enero y no había ningún problema, tenía todos los certificados. Después, hubo un problema y se elevó la hormona», describió el delantero de 38 años en diálogo con radio La Red.
La testosterona está dentro del grupo S4 de sustancias prohibidas en el código antidopaje de la WADA (Agencia Mundial Anti Dopaje) y su función es regular el metabolismo y aportar energía.
«La testosterona actúa como un anabólico, hipertrofiando la musculación. No es un estimulante como la anfetamina», le explicó a Clarín, Luis Pintos, Director del Instituto de Medicina del Deporte y Rehabilitación de Futbolistas Agremiados Argentinos en relación a la sustancia en debate. Además, Pintos descartó la posibilidad de que Silva haya tomado dicha droga para sacar una ventaja deportiva: «La testosterona no es funcional ni necesaria para la actividad futbolística. Nadie va a correr más o jugar mejor por eso. Sí tiene injerencia en fisicoculturistas o en deportistas de fuerza, como lanzamiento de bala o martillo, por ejemplo».
Aunque el Tanque alega que se estaba sometiendo a un tratamiento de fertilidad, el Director Médico de Agremiados opinó que «no hay manera de que pueda evadir una sanción, por más mínima que sea. Porque se trata de una droga prohibida y el jugador sabía lo que hacía. En cualquier caso, el médico de Gimnasia tendría que haberle avisado».
Ante la polémica, Flavio «Pepe» Tunessi, médico de Gimnasia, defendió su trabajo en Radio 103.1: «El cuerpo médico de Gimnasia está exento en el caso Silva, no estábamos al tanto de lo que había ingerido el jugador. Sabemos lo que suplementamos, esto es responsabilidad de él».
La suspensión por presencia de sustancias prohibidas está fijada en dos años en el Código Mundial Antidopaje. No obstante, un artículo sostiene que si el afectado presenta «un historial médico actualizado en el que se justifique la prescripción de esa sustancia específica con fines ajenos a los deportivos» la sanción podría ser reducida. Sin embargo, la «anulación completa del período de suspensión sólo se producirá en casos absolutamente excepcionales».
Por su parte, Silva ya acordó con sus abogados solicitar la contraprueba, tal como permite el procedimiento. Una vez que se haya analizado la segunda muestra, se tomará una decisión definitiva respecto del castigo que recaerá sobre el jugador.
En La Paternal están atentos a lo deportivo también. Si el delantero quedase inhabilitado por más de cuatro meses, Argentinos Juniors podría fichar a otro futbolista en su lugar. El artículo 10 del convenio colectivo de trabajo fija que «si por enfermedad, lesiones o suspensiones el futbolista debiera permanecer inactivo por un lapso mayor de cuatro (4) meses, el club podrá contratar a otro en su reemplazo, sin dejar de cumplir por ello con las obligaciones contraídas con aquel».
Mientras tanto, acompañan al jugador y harán lo posible para que no reciba una suspensión.
Clarín/Deportes