
Talleres resolvió muy rápido el duelo ante un inexpresivo San Lorenzo. Llegó dos veces en el primer tiempo y fue efectivo, aunque no le sobró demasiado. Con la victoria llegó a los 10 puntos y quedó a cuatro de Independiente. Y San Lorenzo terminó no sólo con dos expulsados sino viviendo un momento de zozobra en el aeropuerto.
Un grupo de “allegados” del equipo visitante ya había despedido de mala manera a los jugadores en el Kempes, donde se escucha todo. Y luego fueron al aeropuerto para abordar el charter y delante de la vista de los pasajeros se produjo una discusión.
Tres personas increparon al plantel, Ortigoza contestó algún reproche y entonces se picó. Fue un papelón a la vista de todos, con Montero, Torrico, Pitton y Di Santo calmando las aguas. No hubo trompadas, pero el clima está caldeado.
En el Kempes, Talleres fue siempre mejor. El equipo del Cacique Medina, que ya avisó que cumplirá su contrato hasta el 31 de diciembre, descartando así cualquier interés de Racing, se adueño de la pelota en los primeros 25 minutos. Tuvo preponderancia por el sector derecho con las subidas de Malatini y la movilidad de Fértoli, y por izquierda con Enzo Díaz, pero carecía de profundidad.
El 2-0 con el que terminó el primer tiempo puede suponer un juego aceitado del equipo cordobés, pero no es vistoso ni mucho menos. Eso sí, fue efectivo ante un equipo con graves problemas defensivos. Enzo Díaz cabeceó el córner de Fértoli ante la pasividad de los defensores visitantes y marcó el primero. Después, tras un gran pase de Méndez, Fértoli definió bárbaro ante Torrico. Con muy poquito, igual no pareció exagerada la diferencia. Cada vez que llegaba, lastimaba el local.
Cuando le cedió la pelota al Ciclón, se evidenciaron los problemas colectivos. Sin juego y sin ideas, llegaba al arco local con algún centro aislado. Para colmo, en el final del primer tiempo y en el arranque del segundo, el equipo de Montero tuvo dos salidas en falso que casi generan más goles del local.
Ni los tres cambios en el arranque de la parte final le permitieron mejorar a San Lorenzo. El colombiano Cristian Zapata, amonestado, cada vez que iba a marcar estaba al borde de la expulsión. Pero la roja directa se la ganó Gino Peruzzi ante una fuerte falta sobre Martino. Con un hombre menos, todo se le hizo cuesta arriba al Ciclón.
Sin embargo, tuvo una buena chance para descontar sobre los 30 minutos y tras un tiro libre al corazón del área, dos veces remató Marcelo Herrera hacia el arco: la primera la salvó Guido Herrera y la segunda se fue apenas desviada.
Con once contra diez, Talleres no lo supo liquidar. Tiene una estructura fuerte y siempre se muestra bien parado tácticamente, pero deja la sensación que le falta profundidad y a veces también puntería.
Igualmente, es para destacar que a pesar de las ventas, Medina siempre se las arregla para que la estructura del equipo no se resienta. Ahora se fue el peruano Piero Hincapié a la Bundesliga. Y el presidente Fassi está cerrando la incorporación del colombiano Pablo Ortiz.
Ramón Gómez/Clarín