La poeta bieolorrusa-argentina Natalia Litvinova, de 37 años, editora además de la casa La Bella Varsovia, ganó el II Premio Lumen de Novela para mujeres, con su ópera prima Luciérnaga, en la que narra una historia de desarraigo y memoria, inspirada en su propia vida familiar, recuperando el relato oral de las mujeres de su familia en un mundo inhóspito, donde la historia parece estar a punto de acabarse.
El galardón está dotado con 30.000 euros y la publicación de la novela ganadora en todo el territorio de habla hispana.
Litvinova nació en 1986, pocos meses después del horror nuclear desatado por la explosión de la central nuclear de Chernobyl. Emigró a los 10 años a Buenos Aires. En Luciérnaga aborda la identidad, los lazos familiares y la experiencia privada en un memoir lleno de poesía y sinceridad, que es también un ajuste de cuentas con un pasado marcado por la migración y la necesidad de sobrevivir a un mundo en disolución.
Cuando aún no hemos leído la obra ganadora, la historia de su autora es tan fascinante que merece ser contada: su migración a la Argentina fue por decisión de su madre, ya que su padre era reticente a dejar su país de origen. El día que llegó a Buenos Aires, Natalia Litvinova cumplió 10 años. Su refugio fueron la pintura y la lectura. Hasta aprender el idioma, se aislaba, y su lugar preferido en la escuela fue la biblioteca, donde ayudada con un viejo diccionario aprendía a leer en la nueva lengua.
Comenzó a escribir poesía motivada por Federico García Lorca y la tradición oral. Su primer libro de poemas nació en el taller del poeta argentino Javier Galarza.
De guerras y exilios
Las fuentes de Litvinova son las guerras y los exilios, pues son parte de su propia experiencia y con ambos se identifica. Su primer libro, Esteparia , apareció en 2010. Luego le siguieron Grieta y Todo ajeno, entre otros. Sus influencias son los escritores que moldearon su sensibilidad, los dolores inevitables de la infancia y la melancolía.
En 2016 creó, junto con Tom Maver, la Editorial Llantén, especializada en la traducción de poesía rusa clásica y contemporánea, sobre todo emergente. Su sello ha traducido y editado varias antologías de poetas rusos como Innokenti Ánnenski, Serguéi Esénin, Vladislav Jodasevich y Marina Tsvietáieva, entre otros.
Ha impartido talleres de escritura y cursos en la Fundación Centro Psicoanalítico Argentino, dirige la colección de traducciones de Melón Editora y coordina la sección dedicada a las letras argentinas de la Revista Ombligo. Litvinova representó a Argentina en el IX Festival Internacional de Poesía de Granada, en Nicaragua.
El sello Lumen, fundado en Barcelona en 1960 por Esther Tusquets, fue pionero en dar protagonismo a la literatura escrita por mujeres. Fruto de ese objetivo fue la convocatoria del Premio Femenino Lumen durante los años 1994-1999, concebido como un galardón que descubría talento literario entre las mujeres. Heredero de esa iniciativa, el Premio Lumen de Novela retomó aquel compromiso.
Esta segunda edición se falló ayer en la Fundación José Ortega y Gasset-Gregorio Marañón (Madrid)y recibió 549 manuscritos procedentes de Argentina (117), Colombia (22), Chile (18), España (326), Estados Unidos (17), México (42), Perú (2) y Uruguay (5).
El jurado, que tomó la decisión en forma unánime, estuvo integrado por la directora de cine Ángeles González-Sinde, la escritora y editora Luna Miguel, la escritora argentino-española Clara Obligado, la directora de la Librería Rafael Alberti, Lola Larumbe, y María Fasce, directora literaria de Lumen, Alfaguara y Reservoir Books.
Susana Reinoso/Clarín-Cultura