Locura en el estadio O2 de Londres. Nadie lo podía creer. O sí, porque para derrotar a Rafael Nadal no hay que darle respiro un segundo. Recién cuando se lo saluda en la red se lo puede considerar vencido si perdió. Así lo comprobó Daniil Medvedev que fue el testigo de lujo de una remontada impresionante del español en el Masters (9 millones de dólares; sintética). El ruso, cuarto favorito, ga naba 5-1 en el tercer set, pero el número 1 del mundo dio vuelta la historia -levantó un match point en el camino- y se llevó un triunfo que mantuvo vivas sus chances de avanzar a las semifinales. “Hoy fue un día en los que deberías perder. Son esos partidos que ganás una de mil veces”, comentó el máximo favorito tras su épica victoria por 6-7 (3-7), 6-3 y 7-6 (7-4).
“Cuando estás 1-5 en el último parcial pensás que en cinco minutos vas a estar en el vestuario porque es lo lógico. Y jugás sin presión porque tenés casi perdido el partido. La verdad: tuve un poco de suerte”, reconoció el mallorquín. Y agregó: “La clave es aceptar que el rival está jugando mejor que vos, mantenerte positivo y seguir con la cabeza en el partido”.
Nadal, que nunca pudo ganar el título del torneo final de la temporada, irá mañana por el pase ante el griego Stefanos Tsitsipas (sexto) que aseguró su clasificación al derrotar por 63 y 6-2 al alemán Alexander Zverev (séptimo), el campeón defensor.
“Me sorprendió un poco mi actuación. Hice todo bien una vez más. Hoy tengo una clara idea de lo que quiero hacer en mi cabeza y puedo desarrollar mi juego. Ante Nadal voy a tener que dar todo y no será fácil. El es un grande”, dijo Tsitsipas
A pesar de la derrota, Zverev igual sigue con chances de avanzar porque venció a Nadal en el debut y definirá su suerte frente a Medvedev, que tampoco está eliminado.
Clarín/Deportes