El juvenil Luciano Tacchi, una de las promesas del tenis argentino, fue exonerado tras haber sido suspendido en forma provisoria por dopaje en mayo pasado por la Federación Internacional (ITF), al demostrarse que sufrió una “contaminación ambiental”. Según publicó en su página oficial la ITF, se determinó que el correntino de 18 años “no tiene culpa ni negligencia por la violación en el sentido del Artículo 10.4 del Programa Antidopaje”. Así, podrá volver a competir inmediatamente.
La defensa efectuada por los abogados del tenista, el argentino Ariel Reck y el estadounidense Paul Greene, logró demostrar que Tacchi fue víctima de lo que se denomina “contaminación ambiental” por cocaína. Sin jugar desde principios de mayo, Tacchi fue suspendido en forma provisional al ser notificado que tenía una dosis baja de cocaína en su examen de orina realizado en el M15 (ex Futures) de Pinamar -del 25 y el 31 de marzo de 2019-.
Esa muestra fue enviada al laboratorio acreditado por la Agencia Mundial Antidopaje (WADA) en Montreal, Canadá, para su análisis, y se encontró que contenía benzoilecgonina, un metabolito de la cocaína, una sustancia no especificada en la categoría S6.a (Estimulantes) de la Lista Prohibida de la AMA 2019. Y luego de siete meses de investigación, el correntino quedó “elegible” para reanudar la competencia con “efecto inmediato” dentro del circuito.
Tacchi -que llegó a estar en la vigésima posición del ranking junior de la ITF- dio positivo tras el control realizado el 26 de marzo, junto a otros dos argentinos: Mateo Martínez y Franco Agamenone, quienes purgan suspensiones de 20 y 10 meses, respectivamente.
Cuando fue notificado que tenía una dosis baja de cocaína en su examen, el correntino comenzó una lucha para tratar de demostrar su inocencia que incluyó tres exámenes diferentes. El primero de ellos, realizado en su pelo, se efectuó en Argentina pero la ITF no lo consideró con la suficiente precisión como para tomarlo como una prueba válida.
Con este escenario, se hizo una segunda prueba con el reconocido francés Pascal Klimtz, que actuó en un caso por la misma sustancia de su compatriota Richard Gasquet. En los análisis de uñas y pelo se demostró que, por el largo del cabello de cerca de seis meses, la cantidad exigua de cocaína era compatible con una contaminación e incompatible con un consumo voluntario.
Así, las perspectivas de un caso más que complejo comenzaron a ser buenas, pero la ITF pidió que se hicieran nuevas pruebas con el mencionado Klimtz. Luego de reiterarse el procedimiento con el objetivo de lograr la absolución, se dieron idénticos resultados y se descartó que tenga algún tipo de adicción y se estableció que nunca había probado esa droga.
Tacchi solía quedarse a dormir en la casa de un familiar que consumía cocaína y fue víctima de lo que se denomina “contaminación ambiental”, de lo que hay escasos registros en deportes a nivel mundial. Incluso, en la segunda prueba efectuada al tenista, otro familiar que habitaba en la misma vivienda se realizó también el examen, cuyos resultados arrojaron que contaba con el mismo tipo de contaminación, sin haber consumido esa droga.
Infobae/Deportes