
El Campeonato Argentino Abierto de polo tendrá mañana, desde las 16.30, una final de lujo. La que todos esperaban. La que no tuvieron Hurlingham ni Tortugas, las primeras dos citas de la Triple Corona, pero que sí se dará en Palermo, donde La Dolfina, el eterno gigante, y La Natividad, la nueva potencia, se disputarán el trofeo más deseado.
Los cuartetos de Cañuelas chocarán en un duelo que sentenciará cuál es el mejor de la temporada, en la que se dividieron los primeros torneos. Y porque romperá el “empate” del historial entre ambos en definiciones del Abierto.
La Dolfina y La Natividad chocarán por tercer año consecutivo en el desenlace de Palermo. El conjunto de Bartolomé y Camilo Castagnola, hijos de Lolo y sobrinos de Adolfo Cambiaso, ganó el de 2021 por 15 a 13 y gritó por primera vez campeón en su primera final en el certamen.
Decidido a restablecer su reinado, Adolfito Cambiaso le dio un lugar en el equipo a su hijo Poroto, un crack distinto, por entonces de 16 años y ya con 9 de hándicap. Esa versión de 39 goles de La Dolfina pasó por encima en la final de Palermo a La Natividad, que había conservado la formación de 2021 (aunque había subido a 39 goles).
Tras el contundente triunfo por 13 a 9 de Cambiaso y compañía en el cierre del Argentino Abierto, donde consiguieron el 15° trofeo en su 22ª final, el mejor jugador del mundo anunció que su equipo mantendría los cuatro integrantes para 2023. Y La Natividad se dio cuenta de que iba a tener que cambiar para darle pelea este año.
Los Castagnola sumaron a dos polistas de renombre: Facundo Pieres y Pablo Mac Donough, quienes habían jugado juntos en Ellerstina entre 2003 y 2010.
El back de la “Z” sentía que había cumplido un ciclo en el equipo de su familia y con 36 años se sentía listo para un nuevo desafío y quería darse la chance de volver a ganar Palermo, un torneo que conquistó “solo” tres veces, la última en 2012.
Mac Donough eligió sumarse al proyecto de La Natividad, al que llegó con muchísima experiencia (ganó 11 veces el Abierto y cuatro la Triple Corona) y una gran caballada, un aspecto clave para el alto hándicap, en el que el equipo verde necesitaba mejorar.
La Dolfina, de 40 goles (Poroto llegó a 10), y La Natividad, de 39 (Facundo bajó a 9), arrancaron 2023 como los grandes favoritos. El equipo de Cambiaso se impuso por 18 a 13 a La Hache y conquistó Hurlingham. La Natividad festejó en Tortugas también ante La Hache.
Los dos llegan al duelo decisivo invictos. El eterno gigante, con tres titanes y un joven tan (o más) talentoso que su papá, quiere extender su reinado. Y la nueva potencia con dos cracks con futuros enormes y dos jugadores distintos y experimentados. La Dolfina-La Natividad, esa final soñada que todos querían ver.
Clarín/Deportes