Agustín Ruberto cumple hoy, día de Reyes, 18 años y tendrá, como buen pibe que es, varios regalos. Es que no sólo realizará la pretemporada bajo las órdenes de Martín Demichelis y viajará mañana a la madrugada a Miami junto con el resto del plantel profesional, sino que además firmará un contrato que lo unirá al club hasta diciembre de 2027 con una cláusula de rescisión que asciende a 30 millones de euros libres de impuestos.
Se trata de una importante mejora, dado que su actual vínculo, que vencía a a fin de año, tenía cotizada su salida en 25 millones de la moneda comunitaria. Así las cosas, el club que desee llevarse al chico que hace pocos meses fue goleador del Mundial Sub 17 de Indonesia tendrá que abonar lo mismo que pagaría por Facundo Colidio, quien era hasta ahora el más caro del plantel.
Se trata de una fuerte apuesta de la dirigencia de River, que no desea que se repita la historia de Claudio Echeverri. Es cierto que la venta del Diablito terminó siendo un importante negocio para la institución. Sin embargo, la idea primitiva antes de que la oferta de Manchester City sacudiera, con lógica, los cimientos del pibe y de su entorno era elevar esa cláusula de salida para tratar de maximizar la inversión hecha desde el momento en que lo trajeron desde Chaco.
Ruberto es un centrodelantero nato. Mide 1,85 metro y fue el gran complemento de Echeverri durante todo el camino en la cantera del Millonario. Potencia, olfato, buena ubicación y rapidez para definir son algunas de las características que le mostró al planeta durante la aventura en Indonesia bajo el mando de Diego Placente: anotó ocho goles y quedó a solo tres del récord de Javier Saviola.
Se espera que Ruberto, que fue convocado en un par de oportunidades para jugar en Primera aunque no llegó ni a sentarse en el banco, tenga más chance en 2024. Arrancará el año con sólo dos delanteros por encima: el colombiano Miguel Ángel Borja y Colidio.
Clarín/Deportes