“Espero que esta victoria sea un anticipo y un buen augurio del partido de hoy por la Copa Libertadores. Cuando se juegue estaré durmiendo, pero estoy muy contento de representar a mi club, Boca Juniors, después de un año de mucho trabajo para lograrlo”, comentó contento Manuel Andújar, el piloto lobense que se impuso en la cuarta etapa del Dakar, en cuatriciclos.
Así extendió la racha de victorias argentinas en esa categoría ya que en la segunda se había impuesto Pablo Copetti y luego fue el turno de Nicolás Cavigliasso.
“Fue un día muy largo, pero estoy contento de haber llegado a Riad. El año pasado, la última vez que estuve acá, fue cuando concluyo el Dakar, pero antes de eso había ingresado con un motor roto de tiro con Tim y Tom Coronel. Pero lo de hoy, meter una etapa, me pone muy feliz”, señaló Andujar al llegar al campamento en la capital del reino saudí.
Aclaró además que es necesario no perder el foco para poder sortear cada día de la competencia. “Creo que debo mantener un buen ritmo durante todas las etapas. Estoy descontando tiempo de la pinchadura que sufrí en el día 2. Es primordial estar sereno, mantener la calma y seguir en carrera”, puntualizó.
Andujar indicó que además no hay que desconcentrarse porque los terrenos son muy exigentes. “La verdad es que el especial de hoy estuvo bravo, hubo varios peligros y quienes no le prestaron atención termimás naron en el piso. Mañana tendremos que estar atentos durante toda la etapa para no caernos en los días que quedan”, finalizó quien ocupa el cuarto puesto en la general.
Más allá de su triunfo, Cavigliasso se adueñó de la vanguardia en la clasificación. El cordobés, tras ubicarse segundo en el parcial, es el nuevo puntero por apenas nueve segundos respecto del francés Alexander Giroud.
También se destacaron Tobías Carrizo, que con 18 años es el piloto más joven del Dakar, al llegar en el noveno puesto delante de Copetti.
En motos, Luciano Benavídes (Husqvarna) llegó tercero en la etapa extensa de las que se desarrollaron en el Dakar; el capítulo fue dominado por el español Joan Barreda Bort (Honda). El salteño llegó extenuado, pero sumamente feliz por su actuación que lo ubicó en el sexto puesto de la general detrás de su hermano Kevin (Honda), que llegó 14°.
“Este Dakar es único. Hay un juego de estrategias que nos alterna entre los que avanzamos un día y al otro nos mantenemos retrasados para no abrir camino. Y así permanentemente. Es muy interesante porque está abierto para un grupo grande”, comentó Kevin Benavídes.
Franco Caimi va de menor a mayor y está en el 18° lugar en la general y ya en un buen ritmo tras los problemas con el embrague de su Yamaha de dos días atrás. El francés Xavier de Soultrait (Husqvarna), compañero de Luciano Benavídes, lidera.
En autos, Nasser Al-Attiyah (Toyota) volvió a ganar y le descuenta día a día, aunque sea de a poco, a Stephane Peterhansel (Mini) que sigue como líder. El qatarí recortó 11 segundos y está a 4m58s del francés, recordman de la historia del Dakar.
Tercero, muy lejos, a 36m19s, se ubica el español Carlos Sainz (Mini), que postergó su chance de ganar la carrera más exigente del mundo.
Roberto Berasategui/Clarín