
La gira de Roger Federer por Latinoamérica sufrió diversos contratiempos que afectaron a su organización inicial. En primera instancia resaltó el cambio de rival ya que Alexander Zverev debió tomar el lugar de Juan Martín Del Potro para el partido de Buenos Aires, pero la situación fue más difícil en Bogotá al punto de que el partido entre el suizo y el alemán se suspendió por el toque de queda que impuso el gobierno colombiano minutos antes de la exhibición. Ante la imposibilidad de jugar y la desilusión de los miles de fanáticos que ya estaban en la cancha esperando a ambos jugadores, Tony Godsick- representante de Federer- anunció que el tenista indemnizará a quienes compraron las entradas. “Roger compensará a sus aficionados de Bogotá. Nuestro objetivo es que el partido se celebre el próximo año”, deslizó. Además buscó dar alternativas ante las complicaciones que puedan llegar a surgir en el futuro. “En caso de que no se pueda llevar a cabo el partido, Roger devolverá el dinero y se asegurará de que los fans lo recuperen a cambio de sus tickets. De poder encontrar una fecha, lo ideal sería que Federer jugará allá. Quizá cerca del Masters 1000 de Miami”, afirmó.
Godsick dejó en claro la insatisfacción de Federer cuando se canceló el partido. “Los aficionados colombianos fueron increíblemente ruidosos con Roger. Esta hermosa historia no debe terminar con la suspensión y eso está claro”, sostuvo.
Las declaraciones del entorno del mejor tenista de la historia fueron en contraposición al comunicado que emitió Emanuel Mate -gerente de la empresa que organizó el evento fallido- que detalló que “por fuerza mayor es imposible realizar la devolución del dinero”. El empresario también afirmó que “el monto con el que contábamos no está en las arcas de la compañía porque fue utilizado para cancelar el partido”.
Clarín/Deportes