MG Radio 24 Villa Pueyrredón
La argentina Julia Riera tuvo un muy buen 2023 y parece que quiere seguir de racha en 2024. Llegó a Brisbane para jugar la clasificación del WTA 500 de esa ciudad australiana y tuvo que luchar durante seis sets en dos partidos para llegar a su primer cuadro principal en un torneo de esta categoría. Y ahora, encima, logró sus primeras dos victorias. La pergaminense de 21 años superó por 6-2 y 6-4 a la búlgara Viktoriya Tomova, 75° del ranking. Y luego, en la madrugada argentina, dio cuenta de la rusa Ekaterina Alexandrova por 6-3 y 6-4, para meterse en los octavos de final del torneo.
Riera, se insiste, no había jugado jamás un WTA 500. Es más, apenas había competido en dos WTA 250 el año pasado. En mayo había asombrado al ser semifinalista en Rabat, Marruecos. En tanto, en julio llegó a los octavos de final en Lausana.
En Brisbane, además, la estadounidense Sofia Kenin, la campeona del Abierto de Australia 2020, sorpresivamente perdió por 7-5 y 7-6 (9-7) ante la australiana Arina Rodionova. Mientras que la bielorrusa Victoria Azarenka, ex campeona de Brisbane y del Abierto de Australia, sufrió mucho más de la cuenta y en el quinto punto de partido venció a la rusa Anna Kalinskaya por 6-1 y 7-6 (10-8).
Como suele suceder, los argentinos no tuvieron un buen debut post fiestas de fin de año: Sebastián Báez (28º) y Tomás Etcheverry (30º) fueron eliminados este martes de la primera ronda de Brisbane al caer ante el eslovaco Lukas Klein (170º) y el checo Tomas Machac (78º), respectivamente.
Báez perdió ante Klein por 4-6, 6-3 y 6-4, en dos horas y 15 minutos, mientras que Etcheverry fue superado por Machac con un 6-7 (5), 7-5 y 7-6 (1) en tres horas y nueve minutos. En los días previos ya había quedado fuera de carrera el porteño Diego Schwartzman (114º) tras caer por 6-1 y 6-4 ante el estadounidense Alex Michelsen (97º).
