El Real Madrid sufrió una dura derrota en la segunda jornada de la temporada 2020/21 de la Euroliga: cayó contundentemente 77-93 ante el Valencia Basket y fue dominado por su rival durante toda la segunda mitad del partido, en la que no encontró respuestas al gran ataque de los valencianos. Facundo Campazzo y Gabriel Deck fueron titulares, mientras que Nicolás Laprovittola no jugó.
Facundo Campazzo lideró a los madrileños durante el primer cuarto, con su siempre explosivo ataque y su facilidad para impactar ya sea desde la anotación o desde su visión de juego. La ofensiva de los de Pablo Laso pasó constantemente por sus manos. Sin embargo, jamás pudieron sacarle una ventaja mayor a cinco puntos a los valencianos, que a fuerza de triples de Bojan Dubljevic (2/4 en ese parcial, 24 puntos y 6/9 en total) y del poderío interno de Nikola Kalinic (3 de 3 en dobles) logró manterse a tiro: 19-17.
Sin el argentino hasta el cierre, el flujo del Madrid se atascó y eso fue aprovechado por el Valencia durante el segundo segmento. Carlos Alocén no pudo ser factor en la gestación y el equipo taronja metió un parcial de 12-2 para ponerse adelante en el marcador y terminar mejor que su rival la primera mitad: 39-44 para los visitantes.
Valencia comenzó el complemento de la misma forma que terminó el segundo cuarto: castigando a la defensa rival a través de sus principales vías de anotación. En este caso, Dubljevic y Kremen Prepelic se combinaron para encestar tres triples y meter un parcial de 8-2 en el inicio. Ese mal presente desde el tiro por el lado de los de la capital española continuó y su contrincante continuó su marcha arrolladora: 55-75 al finalizar el tercer parcial.
Lejos de aminorar el ritmo, Valencia sacó una ventaja aún mayor en los primeros minutos del cuarto final. Con una racha de 12-4, borró cualquier sueño de remontada del Madrid y prácticamente se aseguró la victoria, que finalmente cayó en sus manos gracias a su ataque fulminante. El resultado final (77-93), esta vez, evidencia a la perfección el control que el equipo ganador tuvo sobre el derrotado. Principalmente, en la segunda mitad del juego.
Facundo Campazzo: 14 puntos (2/4 en dobles, 3/7 en triples, 2/2 en libres), 4 rebotes, 3 asistencias, 2 recuperos y 4 pérdidas en 26:27 minutos en cancha.
Gabriel Deck: 2 puntos (1/3 en dobles, 0/2 en triples), 7 rebotes y 3 pérdidas en 21:09 minutos en cancha.
Nicolás Laprovittola: no jugó.
Luego de lograr el triunfo 102-96 en el cuarto partido de la serie ante Miami Heat, el plantel de Los Ángeles Lakers encara el quinto de las Finales con una certeza: si lo gana, se quedará con el campeonato de la NBA que tanto ha esperado la franquicia en los últimos diez años. Para eso, deberá lograr varias cosas.
El capítulo más reciente de la eliminatoria volvió a demostrar algo que era bastante claro: la franquicia angelina cuenta con dos de los jugadores más determinantes que tiene la competencia. LeBron James es fundamental desde la creación. Pero, cuando falla en ese aspecto o el rival lo presiona, es capaz de ponerse al equipo en la espalda e impactar con sus recursos ofensivos. Anthony Davis, por otra parte, puede ser fundamental tanto en ataque como en defensa. En ese costado de la cancha fue donde ganó el juego cuatro, siendo el puntal del sistema de Frank Vogel.
Una de las claves del próximo enfrentamiento será el emparejamiento entre él y Jimmy Butler. Si los Lakers logran que el perimetral de los de Florida no luzca como en el tercero, será porque el interno volvió a ser factor en su marca. Mantener ese mano a mano es vital para los angelinos, que sufrieron por demás el nivel del ex Minnesota Timberwolves y Chicago Bulls.
Al mismo tiempo, Miami tendrá que enfocarse en realizar un partido perfecto en lo que respecta a capitalizar los errores de Los Ángeles. Las pérdidas han sido un verdadero problema para los Lakers y el Heat deberá aprovecharlas para correr la cancha y generar puntos fáciles. Presionar a los generadores de juego y obstaculizar la conexión con Davis serán las premisas de los de Erik Spoelstra.
La franquicia de la Conferencia Oeste se enfrenta a un escenario más que adverso: apenas un equipo ha sido capaz de remontar un 1-3 en contra y el líder de ese conjunto está del otro lado del tablero. Además, James ostenta un 3-0 en partidos en los que los suyos tienen la chance de cerrar unas Finales. Mientras los de California jugarán esas cartas a favor para desesperarlos, ellos deben continuar por el camino que encararon a partir del Game 3 y que les ha permitido llegar a esta instancia: presión defensiva, movilidad de sus piezas en ataque y el extrapase como arma principal.
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