Si a un rugbier se le preguntara por un sueño a lograr, probablemente una de las respuestas más escuchadas sería: ganarle a los All Blacks en su casa. Los Pumas se dieron el gustazo de cumplir ese sueño el 27 de agosto del año pasado, en Christchurch, por 27-18. Fue el primer triunfo del seleccionado nacional ante los neozelandeses. Y ahora se sumaron Los Pumas 7’s a esa hazaña, porque Argentina se consagró campeón del Seven de Hamilton, en Nueva Zelanda, con una remontada espectacular en la final ante los de negro, a quienes les ganaron 14-12.
Es la primera medalla argentina en el circuito mundial de seven de este año, lo que debería darles impulso para los próximos meses. Es la cuarta vez en la historia en la que Los Pumas se suben a lo más alto del podio, después de Los Ángeles 2004, San Diego 2009 y Vancouver 2022.
Fue una levantada heroica, con el agregado de haberla hecho en el mismísimo patio de la casa de una de las selecciones más importantes del mundo. Los All Blacks pensaban que tenían el partido en el bolsillo después de irse 12-0 al descanso, con tries de Akuila Rokolisoa (una conversión) y Roderick Solo, pero los dirigidos por Santiago Gómez Cora se repusieron con un despliegue defensivo emocionante y tries de Santiago Álvarez Fourcade y de Marcos Moneta, quien dibujó una carrera a puro amague para el primer triunfo en un torneo en suelo neozelandés. Las conversiones fueron de Santiago Vera Feld y de Tobías Wade.
El segundo tiempo de Los Pumas 7’s rozó la perfección, pero la angustia también fue protagonista en el cierre del partido, porque sobre la chicharra final hubo una jugada polémica cuando el neozelandés Brady Rush pareció apoyar el balón con un codo en el ingoal albiceleste. Pero el árbitro del TMO dictaminó que no había try por knock-on y certificó la victoria de la Argentina.
“Sabíamos que la final iba a ser realmente dura. Tuvimos un muy mal comienzo, pero nos dijimos que íbamos a dar lo mejor de nosotros mismos en el segundo tiempo. Estoy muy feliz. Este equipo ha estado trabajando duro. Ganar un torneo ya es díficil, pero derrotar a Nueva Zelanda en su país es historia pura. No hay dudas de que es algo soñado”, aseguró Gastón Revol.
Sobre el desarrollo del partido, el cordobés resumió: “Arrancamos con unos pequeños errores y se nos hizo un poquito cuesta arriba, pero en el entretiempo nos dijimos de hacer el mejor segundo tiempo del año, de salir a dar pelea, a darlo vuelta. Así fue: pudimos dar vuelta y después por suerte aguantamos y nos llevamos el título”.
En la final, el entrenador Santiago Gómez Cora alineó a Rodrigo Isgró, Agustín Fraga, Luciano González, Revol, Vera Feld, Matías Osadczuk (capitán) y Moneta. Y luego entraron Álvarez Fourcade, Wade, Joaquín Pellandini y Germán Schulz.
En el primer día de competencia, Los Pumas habían finalizado segundos en el Grupo D, tras vencer a España (20-5) y a Canadá (29-14), y perder frente a Sudáfrica (17-14). En los cuartos de final superaron 19-10 a Fiji y se metieron en la final al vencer 24-14 a Estados Unidos.
Con los 22 puntos que obtuvo por su título en Hamilton, la cuarta etapa del circuito, Argentina escaló hasta el tercer puesto del ranking con 59 unidades. Quedó nada más que a dos de Estados Unidos y a cuatro de los All Blacks.
Los Pumas 7’s habían dado un gran paso en 2019 con la medalla de oro en los Juegos Panamericanos de Lima. Pero el gran golpe fue la medalla de bronce obtenida en los Juegos Olímpicos de Tokio 2020. Y este equipo no se conforma y va por más.
“Estamos muy contentos y con ganas de disfrutar de este hecho histórico -insistió Revol-, pero a partir de mañana tenemos que meter la cabeza en lo que se viene, porque todo en el circuito es así”.
Lo que viene es la quinta etapa, que se disputará del viernes al domingo en Sydney, Australia. Cuando el 21 de mayo de 2023 termine la undécima y última cita de la gira, los cuatro mejores del ranking (excluido Francia) tendrán un premio suculento: la clasificación a los Juegos Olímpicos de París 2024.
Clarín/Deportes